martes, 9 de junio de 2020

¿Ahora, no dices nada, Miguel Angel Rodriguez?

Me costó mucho, de esta vez, decidir el articulo a escribir. Material noticiero y de opinión existe  "a barrer" en el actual momento de pandemia y de asquerosa política,  y digo, asquerosa politica, dada la osadía que después de unas elecciones limpias, votadas por el pueblo con total normalidad, la derecha extrema, la extrema derecha, la clase mediática, financiera, empresarial, la Iglesia Católica, cúpulas de actuales instituciones, determinadas viejas glorias del anterior PSOE, estén empujando con todas sus fuerzas para considerar ilegítimo a este gobierno y, por lo tanto, desplazarlo del poder. En este momento es un clamor la cantidad de artículistas de tendencia progresista que lo están señalando con total claridad.
No quiero distraerme de la idea inspirativa que me surgió de repente, para escribir este artículo, a raíz de la columna que Antonio Maestre ha escrito en eldiario.es, medio digital periodístico alternativo, "muy jugoso él", como muchos otros medios de esta indole, los cuales, valientemente, están haciendo una labor de denuncia digna de las mejores alabanzas, debido a la "inyección de abertura de ojos" que proyectan a la ciudadania, lo cual tiene que ser, debiera ser, nuestra salvación como sociedad al tomar  conciencia de si misma. Ojalá no sea tarde.

He aquí, el articulo de Antonio Maestre:

¿A quién llamarías nazi ahora, Miguel Ángel?

Los responsables del Gobierno madrileño no son nazis y no hace falta serlo para que el escándalo de las residencias sea uno de los más terribles de su historia política


 "El doctor Luis Montes fue un hombre bueno, en el mejor sentido de la palabra. Luchó como médico para hacer más llevadero el tránsito a la muerte de personas en estado terminal en el Hospital Severo Ochoa de Leganés. Eso le costó la campaña más miserable y despiadada del PP de Madrid desde que gobierna. Y es mucho decir. Esperanza Aguirre, Manuel Lamela y sus palanganeros mediáticos se ocuparon de destrozar su vida. Le llevaron a los tribunales y perdieron, pero el daño ya estaba hecho. Como dijo el propio Luis Montes, consiguieron que la gente muera peor que antes
No cejó en su empeño el buen doctor que, como presidente de la Asociación Derecho a Morir Dignamente desde 2009, siguió luchando para que los enfermos terminales pudieran tener una muerte plácida, sin dolor y lo más humana posible. La justicia le absolvió hace años, la historia también. Qué pena que no pueda haber vivido para presenciar con la cabeza alta la miseria de quien utilizó su bonhomía por motivos políticos para destruirle.
La campaña orquestada contra el doctor Montes acusándole de decidir quién vivía y quién moría se demostró falsa. Ahora, en 2020, hay que dirimir si quien tomaba esa decisión era el Gobierno de la Comunidad de Madrid al enviar instrucciones a hospitales y residencias para que no se derivara a los ancianos con COVID-19.
No parece que seamos conscientes aún de la gravedad de la decisión que tomó la Comunidad de Madrid. Una orden política que consistía en decidir quién tenía oportunidades de salvarse y quién quedaba desahuciado sin tener asistencia hospitalaria. A mediados de marzo dejé escrito el drama al que se vería sometido el personal clínico al tener que realizar triajes extremos para decidir quién tenía oportunidad de salvarse en detrimento de otras con menos posiblidades. Un dilema profesional que no ha sido exclusivo de España. El político italiano Mario Sberna, que estuvo ingresado grave por COVID-19, dijo: "Me he salvado gracias a la bombona de oxígeno que le quitaron a un hombre de Mantova de 84 años para dármela a mí." Pero la orden de la Comunidad de Madrid no estaba sujeta a motivaciones clínicas, era un expurgo motivado por la incapacidad asistencial que la privatización sistémica de décadas de Gobierno popular había propiciado en el ámbito geriátrico y que le explotó en la cara con esta crisis sanitaria.
Uno de los mandados que intentó despedazar el buen nombre del doctor Luis Montes fue Miguel Ángel Rodríguez, que en un programa de TVE le llamó nazi repetidas veces de forma despreciable, asegurando que lo era por decidir quién vivía y quién moría. Una afirmación por la que el consejero áulico de Isabel Díaz Ayuso fue condenado a pagar al doctor 30.000 euros. Si el asesor repetidamente condenado atendiera a las preguntas de los periodistas, se me ocurriría una para MAR: ¿a quién llamarías nazi ahora, Miguel Ángel?
Madrid no es Berlín cuando se implementó al Aktion T4. La consejería de sanidad no está ubicada en Tiergartenstraße 4 y Enrique Ruiz Escudero no es Viktor Brack. Ustedes no son nazis y no hace falta serlo para que el escándalo de las residencias en Madrid sea uno de los más terribles de su historia política. Como dijo Alberto Reyero, consejero de Asuntos Sociales del Gobierno de la Comunidad de Madrid, al que le despojaron de las competencias en las residencias en plena crisis, la decisión de no dar traslado a los ancianos a los hospitales fue "inmoral" y veremos si "ilegal". Y no hace falta ser un nazi para poder acabar en prisión. Que de eso en el PP sí que tienen experiencia."
                                                                      --------------
¿Y ahora qué dicen a lo que hicieron con el Doctor Montes? ¿ No se les pone la cara colorada? ¿No se dan cuenta de que es una indignidad? ¿No se dan cuenta de que han caído en la ratonera? ¿No se dan cuenta de los grandes calumniadores que son? ¿No sienten verguenza de la grande? ¿Como se justifican ahora?
Pues nada, seguirán igual, porque no son personas, porque son unos golfos avariciosos, sedientos de seguir dirigiendo este pais a su manera, sedientos de seguir siendo corruptos, sedientos de no pegar un palo al agua como siempre, y cuando hacen algo es pura trampa, como hicieron con el 11M, con el Yak-42, con el Caso Gurtel, con las cloacas del estado; lo malo es, que ahora, gente que nos gobernó a partir del año 1982 y que nos creó en un principio, mucha ilusión, alguno de ellos, prefieran ver gobernar al PSOE con los señalados corruptos, conspiradores y, no, con Podemos. ¿De que hay miedo?:Esperamos saberlo pronto; lo intuimos, claro está.
Lea el articulo de Antonio Maestre:¿A quién llamarías nazì ahora, Miguel Angel
Lea el articulo de Jesús Maraña:Contrainforme del 8M:atizando al feminismo para ocultar el horror de las Residencias

8 comentarios:

  1. Miguel Ángel Rodríguez sigue en su papel que para eso se le nombró portavoz. Su misión es achicar agua, por sucia que sea, y si es posible echársela a los demás. A ver por qué iba a cambiar a estas alturas.

    ResponderEliminar
  2. Ahi queda tu opinión, amiga Jaramillo. Gracias por tu visita al blog.Apertas agarimosas.

    ResponderEliminar
  3. Muy buen artículo. Lo tengo difícil leer o escuchar a Miguel Ángel Rodríguez sin molestarme. El rechazo a su figura es automático. Comentario procedente de Antonio Maestre. El escándalo de las residencias debería llegar hasta el Sr. Florentino Pérez.

    ResponderEliminar
  4. Muchas gracias, amigo Aloisio, por tu visita al blog.Si, coincido contigo, Miguel Angel Rodriguez,es un personaje antipolitica,una persona no muy apta en sociedad. Con respecto a las residencias, a parte el personaje que tu mencionas, hay como una mafia alrededor de la " gestión" de las residencias para sacar grandes beneficios.!Un autentico drama ocasionada por gente sin escrupolos!
    Apertas moi agarimosas,amigo.

    ResponderEliminar
  5. Me cuesta mucho materialmente entrar en el blog.
    Ayer dejé mi mensaje pero hoy no lo encuentro.
    Encontré tu articulo muy adecuado

    ResponderEliminar
  6. Ahora me doy cuenta que antes de pulsar PUBLICAR hay que pulsar en VISTA PREVIA!

    ResponderEliminar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar

Facebook